De vuelo a Cuernavaca
Casi 8 meses después de mi última entrada, aquí estoy de regreso.
Gracias a todos aquellos que se tomaron la molestia de escribirme comentarios o correos electrónicos acerca de este blog. La verdad es que es bueno que les guste leerlo y yo también disfruto mucho de escribir aquí, aunque aveces tarde mucho en volverlo a hacer.
Desde mi entrada pasada, para variar han cambiado algunas cosas en el ambiente laboral, primeramente ahora me encuentro viviendo en la ciudad de Veracruz, volando un Falcon 50 muy bonito. La mayoría de nuestros vuelos son a los Estados Unidos: Miami, Houston, San Francisco, San Antonio, Dallas y San Diego, pero de vez en cuando volamos a destinos nacionales como en esta ocasión: Cuernavaca.
Como saben, la aviación general no esta autorizada para volar al Aeropuerto de la ciudad de México. Por lo que todos los vuelos privados cuyos pasajeros se dirijan a la ciudad de México deben elegir el aeropuerto próximo que les quede mas próximo a su destino en la ciudad (Toluca, Cuernavaca, Puebla, Pachuca…), la gran mayoría de las veces se vuela a Toluca y la verdad es algo que se disfruta mucho, porque aunque la base del avión este fuera de Toluca, el ir ahí es una gran oportunidad para encontrarse con amigos y conocidos del medio de la aviación.
En esta ocasión se decidió volar al aeropuerto de Cuernavaca por estar muy próximo a un hospital en el D.F. donde los dueños del avión irían a visitar a un amigo.
En lo que va de mi carrera solamente había ido trabajando en una ocasión al aeropuerto de Cuernavaca y recientemente había volado ahí 3 horas de bimotor que me faltaban para terminar la convalidación de la Licencia Comercial Mexicana (La cual por cierto ya tengo!).
Sería un vuelo muy corto de Veracruz a Cuernavaca con duración total menor a los 40 minutos. El despegue lo realizamos por la pista 18, algo inusual en Veracruz ya que generalmente se utiliza la 36. Poco después del despegue solicitamos un ascenso visual en ruta, que se nos autorizó e inmediatamente iniciamos el viraje por la derecha para interceptar la aerovía.
Ya en el radar podíamos ver el mal clima que nos esperaba en la ruta y al levantar la mirada hacia las ventanas de la cabina podíamos confirmar lo que el radar estaba marcando. Hay que ascender lo mas rápido posible para no meternos en el mal clima. Normalmente nuestros ascensos los realizamos con 260 nudos indicados pero ahora volamos por debajo de los 200 para optimizar nuestro régimen de ascenso.
Al ser un vuelo muy corto y por lo tanto no llevar mucho combustible nos encontrábamos arriba del mal clima adelante en la ruta, en tan solo unos minutos después del despegue, mismos minutos que nos tomo aproximarnos a la elevación mas alta de la república mexicana: El pico de Orizaba. Una de las ventajas de volar en esta aerovía es que, al volar en la MEA (Altitud Mínima de Ruta) realmente uno pasa a tan solo un par de miles de pies del pico de Orizaba, lo cual en un día despejado nos permite tener una maravillosa vista del Volcán. Afortunadamente pudimos apreciarlo y unos segundos después de tomar la siguiente foto nos metimos a IMC (Condiciones Meteorológicas de Instrumentos) y perdimos todo contacto con el terreno.
Continuamos unos minutos mas en nuestra ruta y se aproximaba el tiempo en el que debíamos iniciar nuestro descenso, por seguir dentro de las nubes y tener un tráfico en dirección opuesta a un nivel inferior, no se nos autorizaría nuestro descenso hasta poco después.
Salimos de la capa de nubes, hicimos cruce efectivo con el tráfico en sentido opuesto, y se nos autorizó el descenso, el problema es que estábamos a 20,000 pies a tan solo unas millas de nuestro destino.
Motores a IDLE, Airbrake a posición 2 y vamos para abajo!
El TCAS mostraba a varios Cessnas 152 y 310 que se encontraban alrededor del aeropuerto en practicas con estudiantes abordo, se nos autorizó realizar un inicial por la izquierda a la pista 20, y seria nuestra responsabilidad mantener separación visual con los tráficos en todo momento.
Sorprendentemente en unos instantes ya nos encontrábamos a 1500 pies sobre el aeropuerto reportándonos en el inicial. La torre nos autorizó aterrizar y volamos nuestra pierna Base y Final con una hermosa vista de la ciudad de la eterna primavera.
Al aterrizar me lleve la grata sorpresa de que la nueva terminal del aeropuerto esta ya lista, en ese momento a tan solo unos días de que fuera inaugurada. Aquí les dejo unas fotos que tomé del aeropuerto y su nueva torre.
Finalmente pasamos un buen fin de semana en Cuernavaca, el vuelo de regreso fue sin novedad, eso si, sin saber que sería uno de mis últimos vuelos en este Falcon, pero eso lo dejaremos para mi siguiente post.
Muchas gracias por darse el tiempo de leer.
Nos leemos pronto.